Cuántas veces abrimos los ojos, pero no vemos, miramos hacia otro lado o ni siquiera nos atrevemos a hacerlo. Vivimos en un mundo más globalizado y abierto que nunca y nos entretenemos en lo más lejano mientras ignoramos lo que tenemos al lado; opinamos como expertos sobre lo que ocurre a miles de kilómetros de distancia y no nos paramos a informarnos de lo que nos afecta directamente. Tenemos más información que nunca y no sabemos seleccionarla, muchas opciones y no nos decidimos, demasiado de todo para sentir que siempre nos falta algo.
Parece que nos cuesta dar el paso para cambiar y nos quejamos porque nada cambia, callamos cuando hay que posicionarse mientras pretendemos que se tenga en cuenta nuestra opinión y esperamos sentados cuando hay que hacer un camino. Nos indignamos por lo que ocurrió y no ponemos los medios para que no ocurra, queremos ganar el partido…
Ver la entrada original 205 palabras más